El yoga se refiere a una tradicional disciplina que se origina en la India y se asocia con prácticas de meditación en el hinduismo, el budismo y el jainismo.
Cómo Funciona
El yoga, más que un deporte, es una disciplina pues además de cultivar el cuerpo, también desarrolla la mente, y el alma. El yoga nace en la India y es una práctica de meditación muy común en el hinduismo.
Como comentábamos, el Yoga, no es sólo una disciplina física limitada a realizar ciertas posturas o ejercicios respiratorios. Tras la palabra yoga se encuentra una milenaria filosofía que ha llegado hasta nuestros días con plena vigencia. Es una práctica que nace en Oriente y, cientos de años des pues, es conocida en Europa.
Tipos de yoga
Existen nueve tipos de yoga, pero todos ellos, tienen un mismo objetivo común: la unión del cuerpo y la mente.
Dependiendo del tipo de yoga que practiques puedes fortalecer unas zonas u otras de tu cuerpo, o ganas más flexibilidad o musculatura. No obstante, con independencia del tipo de yoga que elijas, trabajarás la meditación y la unión entre la conciencia individual y la conciencia universal.
Beneficios
Las practica des yoga no dejan de sorprender por los beneficios que se consiguen en las clases, tanto físicos, como mentales y espirituales. Su práctica desarrolla un cuerpo firme, una mente estable y un espíritu estable y en paz.
Beneficios físicos del yoga:
- Físico: Los ejercicios tonifican cada parte del cuerpo.
- Aumenta la resistencia y la flexibilidad.
- Postura: mientras el tono y la flexibilidad se equilibran, se establece una postura erguida y sin esfuerzo.
- Energía: la mejora del funcionamiento glandular y la relajación profunda dejan a uno fresco y calmado.
- Salud: el ejercicio mejora el físico y la meditación mejora la mente, el resultado por lo tanto es una evidente mejora en la salud.
Beneficios mentales del yoga:
- Al realizar los ejercicios se insiste en la meditación, esto genera una mejora en la concentración, la memoria y la atención.
- Estos ejercicios de meditación proporcionan paz y estabilidad emocional: conocer a nuestro yo interno nos da perspectiva sobre la vida y aísla la mente de las alteraciones, se genera un estado permanente de paz y tranquilidad.
- Nos hace comprender el funcionamiento de la mente a través de la observación de la actividad del propio cuerpo y de la respiración.
- Fortalece la autoestima.